Se acerca el verano y muchos ya lo estamos notando en las temperaturas, por esa razón vamos a daros algunos consejos para evitar que con la emoción de la llegada de las vacaciones se nos olvide cuidar nuestro gasto y al terminarlas nos encontremos sorpresas en la factura.
A lo largo de estas semanas hemos ido dando algunos consejos que también añadiremos para que no se nos olviden y así podamos controlar en la medida de lo posible nuestro consumo.
Los días ahora son más largos, por eso debemos aprovechar la luz natural a la hora de hacer tareas que requieran de mucha iluminación, como puede ser leer un libro, navegar en el ordenador, estudiar o coser. De esta manera ahorraremos en el gasto de luz. En el caso de que tengamos jardín o terraza y la queramos iluminar, la mejor opción son la luces LED solares. Además en el interior de nuestra casa, debemos cambiar aquellas bombillas tradicionales que no sean LED ya que de lo contrario nos harán aumentar nuestro consumo.
Es importante aprovechar las primeras horas de la mañana para ventilar la casa, así como protegerla en las horas más agresivas en las que nos podemos servir de cortinas o persianas (mejor opacas o semitransparentes) que no dejen pasar el calor de forma directa, los toldos también favorecen frenando los rayos de sol, consiguiendo así que no se caliente tanto la casa y por tanto evitando el uso excesivo del aire acondicionado. Ya sabemos algunas recomendaciones en lo que a estos aparatos se refiere como por ejemplo, lo importante que es que no los cubramos, así como situarlos en zonas en las que no les da el sol, y sin duda limpiarles los filtros para así evitar que consuman el doble.
Aunque siempre que podamos, debemos evitar encender el aire acondicionado y en su lugar utilizar los ventiladores ya que harán que disminuya considerablemente nuestro gasto.
En cuanto a los electrodomésticos, lo primero que tenemos que hacer si queremos reducir su gasto es verificar que tienen una etiqueta de alta calidad de eficiencia energética (A+++). En el caso de las lavadoras y lavavajillas una buena forma de reducir el gasto es aprovechando su capacidad y utilizando programas eco o en el caso de la lavadora, lavando la ropa con agua fría y programas cortos. La secadora se puede evitar en temporadas con temperaturas tan altas aprovechando para secar la ropa al aire libre.
Otras formas de refrescarnos sin que afecte a nuestra factura energética es consumiendo productos frescos como helados, gazpacho, frutas… así como vistiéndonos con prendas sueltas y frescas y que además no requieran plancha.
Son muchos los detalles que nos pueden ayudar a reducir nuestro consumo energético, desde Lúmina queremos ayudarte a conseguirlo dándote diferentes alternativas para logarlo.